Giacometti. Terrenos de Juego
Del 13 de junio al 4 de agosto de 2013
Alberto Giacometti Hombre que camina I, 1960
Bronce
Fondation Marguerite y Aimé Maeght, Saint
Paul-de-Vence © Alberto Giacometti Estate / VEGAP (España), 2013
http://www.fundacionmapfre.org/fundacion/es_es/cultura-historia/exposiciones/
Giacometti nació en Borgonovo, Val Bregaglia, en Suiza, cerca de la frontera
italiana, donde creció en un ambiente de
artistas. Su padre, Giovanni Giacometti, había sido pintor
impresionista, mientras que su padrino, Cuno Amiet, fue fauvista.
Tras terminar la enseñanza secundaria, se trasladó a Ginebra para cursar
estudios de pintura, dibujo y escultura en la Escuela de Bellas Artes y a
París, en 1922, para estudiar en la Académie de la Grande
Chaumière en Montparnasse bajo la tutela de un asociado de Rodin, el escultor Antoine Bourdelle.
Fue allí donde Giacometti experimentó con el cubismo. Sin embargo, le atrajo más el movimiento surrealista y hacia 1927, después
de que su hermano Diego se convirtiera en su ayudante, Alberto
había empezado a mostrar sus primeras esculturas surrealistas en el Salón de
las Tullerías. Poco tiempo después, ya era considerado uno de los escultores
surrealistas más importantes de la época.
Viviendo en una zona tan creativa como Montparnasse, empezó a
asociarse con artistas como Joan Miró, Max Ernst y Pablo Picasso, además de escritores como Samuel Beckett, Jean-Paul Sartre, Paul Éluard y André Breton, para el
que escribió y dibujó en su publicación Le surréalisme au Service de la
Révolution. Entre 1935 y 1940, Giacometti concentró su escultura en la
cabeza humana, centrándose principalmente en la mirada. Esto fue seguido por una
nueva y exclusiva fase artística en la que sus estatuas comenzaron a estirarse,
alargando sus extremidades. En esta época realizó una visita a España, a pesar de encontrarse en plena Guerra
Civil.
Durante la Segunda Guerra Mundial vivió en Ginebra,
donde conoció a Annette Arm. En 1946
ambos regresaron a París, donde contrajeron matrimonio en 1949. El matrimonio pareció tener un buen efecto en él ya
que le siguió el periodo probablemente más productivo de su carrera. Fue su
mujer la que le brindó la oportunidad de estar constantemente en contacto con
otro cuerpo humano. Otros modelos habían encontrado que el posar para él no era
un trabajo fácil, pero Annette le ayudó enormemente, soportando pacientemente
sesiones que durarían horas hasta que Giacometti lograse lo que buscaba.
Poco más tarde se organizó una exposición de su trabajo en la galería
Maeght de París y en la galería Pierre Matisse de Nueva York, para cuyo catálogo su
amigo Jean-Paul
Sartre escribió la introducción. Perfeccionista, Giacometti estaba
obsesionado con crear sus esculturas exactamente como las veía a través de su
exclusivo punto de vista de la realidad.
En 1954 recibió el encargo de diseñar un medallón con la imagen de Henri Matisse, por lo que
creó numerosos dibujos durante los últimos meses de vida del pintor. En 1962 recibió el gran premio de escultura
en la Bienal de
Venecia, lo que le llevó a convertirse en una celebridad internacional.
El 3 de febrero del año 2010, su escultura El
hombre que camina ('L'Homme qui marche') fue subastada en Londres por 65
millones de libras (74,2 millones de euros, 104,3 millones de dólares),
superando así el récord mundial de una obra de arte vendida en una subasta ese
momento, según la casa que se ocupó de la puja: Sotheby's
No hay comentarios:
Publicar un comentario